Ofrecer a los empleados un plan de desarrollo de carrera profesional que potencie sus conocimientos y habilidades y evite la fuga de talento, aumentando el grado de compromiso con la organización capacitándolos para desarrollar funciones más importantes.
Conocer en detalle el talento dentro de una empresa puede facilitar la toma de decisiones y la gestión de equipos y proyectos. Las tecnologías de People Analytics ayudan al departamento de Recursos Humanos en la difícil tarea de cuantificar y valorar numerosas métricas relacionadas con el rendimiento laboral.
Aquí se empiezan a realizar modelos predictivos que nos ayuden a entender cuál es el perfil que mayor probabilidad de éxito va a tener dependiendo el puesto clave. Hay que comprender con estos modelos cuáles son esos candidatos que más probabilidades tienen de tener un mejor desempeño y de permanecer en la compañía.
Mejorar el rendimiento: la analítica permite determinar si los niveles de desempeño elevados se están recompensando adecuadamente. Si un alto porcentaje de estas personas abandona la empresa, es que probablemente no estén contentas con el reconocimiento que se les está ofreciendo. También es posible determinar si las promociones o aumentos de sueldo tienen un efecto directo sobre el rendimiento o la productividad de los trabajadores beneficiados.
Aquí entran en juego los planes de desarrollo de carrera profesional dentro de la compañía. No sólo se trata de construir un entorno laboral sano y motivador para los trabajadores, también se trata de motivar a nuestra plantilla ofreciendo aquellos incentivos laborales que los mantengan motivados y satisfechos.
El principal objetivo es identificar cuáles son las variables que se implican en el rendimiento y motivación de nuestra plantilla. Estas variables en ocasiones generan un clima ideal para las sinergias positivas, pero en ocasiones pueden generar conflictos o estrés que acaban por desmotivar al personal.
El objetivo es determinar qué empleados están más capacitados y tienen mayor potencial para trabajar y mejorar en un área concreta de la empresa. Esto implica que, en lugar de reclutar nuevos talentos, las organizaciones pueden mirar hacia adentro en busca de esas habilidades entre su personal.
Vincular rasgos profesionales con los resultados comerciales: a través del análisis del talento, el equipo de RRHH puede identificar algunos rasgos como la formación de la plantilla, su experiencia, la evolución salarial, etc. De esta forma puede identificar a aquellos empleados que están mostrando un desempeño por encima de la media en algún área concreta. Esto permite optimizar el proceso de selección y contratar a candidatos con los mismos rasgos.
En cuanto a las habilidades necesarias para afrontar el futuro del trabajo y ser un líder, existe una preocupación a nivel directivo por la disponibilidad de habilidades clave y cómo esto podría impedirles adquirir, desarrollar y retener el talento. Esto está impulsando a un número cada vez mayor de empresas a hacer la transición hacia una "organización basada en habilidades". Lo cual significa que cada vez más empresas hacen mayor énfasis en la contratación de habilidades y no por "educación" o títulos ya que el departamento de recursos humanos es quien debe guiar el proceso de gestión de talento basado en competencias laborales.